CAMPAÑAS NAVIDEÑAS 2021 "La vida es acojonante"
Acojonados
Otro de los grandes clásicos de la Navidad es el esperado anuncio de Campofrío, ya tradicional por sus campañas llenas de emoción y que son capaces de remover nuestros sentimientos. Este año llega bajo el título ‘Acojonados’ y con un lema muy motivador: ‘Que nada ni nadie nos quite nuestra manera de disfrutar de la vida’. Una invitación a disfrutar de todo lo que la vida nos ofrece, dejando a un lado los miedos que nos limitan y que, desde el comienzo de la pandemia, parecen haberse multiplicado.
Una producción muy especial que, en algo más de tres minutos, te demuestra que la vida es acojonante. Está dirigida por Icíar Bollaín y cuenta con un protagonista de excepción: Karra Elejalde.
El año pasado, el mundo se sobresaltó en torno a una pandemia que se ha llevado millones de vida en todo el planeta. Y cuando todos pensábamos que no podía ir a peor, que se iba a resolver, 2021 nos ha sorprendido con un argumento más cercano a las películas de terror o a las películas apocalípticas.
La crisis por el COVID-19 ha continuado, nos enfrentamos incluso a una nueva ola; hace tres meses, el volcán de Cumbre Vieja, en La Palma
La idea de ‘Acojonados’ es que, aunque a veces vivamos con miedo por todo lo que ocurre, aunque vivamos ‘acojonados’, en realidad “la vida es acojonante” y vale la pena superar las dificultades y disfrutar al máximo de cada instante.
La pandemia nos ha recordado nuestra vulnerabilidad, representada por un Karra Elejalde que muestra nuestras angustias y miedos y que decide alejarse de todos ellos refugiándose en la soledad y en la oscuridad de su casa. Hasta allí se desplazan los ciudadanos de La Palma como gran ejemplo de resiliencia y superación ante la adversidad, para concluir que “Lo que más acojona es que se nos olvide que vivir es acojonante”.
La viticultora palmera Victoria Torres ofrece su testimonio a través de un impresionante mensaje que cambia radicalmente la actitud de Elejalde: “Un volcán construye al mismo tiempo que destruye. Mis viñas están en ceniza volcánica. Forma parte de lo que somos, ésta es nuestra casa.
Me siento muy orgullosa de cómo nos cuidamos. Son 6.000 personas fuera de casa. Quien tiene un lugar que ofrecer, lo ha ofrecido. He sentido miedo, pero también el impulso de continuar porque quiero, porque creo que es importante y porque la vida sigue”.
La campaña, añade, sirve para “animarnos a seguir adelante, apelando a nuestra capacidad para sobreponernos”.
